Elecciones Panamá 2024: La Derecha y sus métodos de atrapar electores
- TERKOS
- Jun 1, 2024
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Updated: Aug 16, 2024

Desafíos para la construcción de la democracia participativa en Panamá
Rosario Arias Peña
Panamá es uno de los siete países del Continente Americano donde se realizaron elecciones el presente año. Uno de los países más pequeños de la región, uno de los más desiguales del mundo, con altos niveles de crecimiento, se abocó a elecciones generales el pasado 5 de mayo de 2024; se eligieron, además del Presidente de la República, 71 legisladores o Diputados de la Asamblea Nacional (19 del grupo identificado como VAMOS – denominados independientes[1]), 81 Alcaldes, 702 Representantes de Corregimiento (la mayoría electos de partidos tradicionales) y 11 Concejales. Todos con sus suplentes.
Algunos señalan que desde 1990 regresamos a la democracia, como si vivir en democracia se tratara de cambiar gobernantes cada cinco años en elecciones. En 1989 Estados Unidos invadió el país, y culminó de forma cruenta la Dictadura que fue bien vista por el poder real del mundo durante el período 1968-1986, incluso por los propios Estados Unidos, hasta que consideró que transgredía sus intereses. En 1981 falleció[2] el General Omar Torrijos y fue sucedido, luego de intensas luchas internas en las Fuerzas de Defensa, por el General Manuel Antonio Noriega, quien presidió el Gobierno supuestamente civil, pues se hicieron elecciones amañadas en 1980 y 1984. Claras evidencias del desgaste de los regímenes militares en América Latina fueron en Panamá las reformas constitucionales de 1978 y 1983. Y es que las reformas citadas fueron consideradas desde 1972 cuando se cambió la de 1946 por una de corte militarista, misma que otorgó poderes y funciones exclusivas al General Omar Torrijos Herrera hasta 1978. Fue hasta 1978 que el Senado de los Estados Unidos aprobó el último Tratado sobre el Canal de Panamá por el que se iniciaba la reversión de varios territorios sobre los que, desde 1903, se había otorgado la soberanía absoluta al Gobierno de los Estados Unidos.
Así, a partir de 1990, luego de reformas a la Constitución Política de 1972, cada cinco años se renueva el Gobierno, en elecciones generales que fueron reestablestablecidas en la Constitución y el Código Electoral. A partir de ese año, Panamá ha tenido 7 gobiernos que, sin diferencia, han aplicado el modelo económico neoliberal instaurado en el país desde 1979. Han sido administradores del neoliberalismo, manteniendo a Panamá como el cuarto a nivel mundial en desigualdad y el segundo en América Latina, pese a crecer económicamente más que el resto de los países de la región hasta el año 2023.
Al realizarse los comicios se dio como ganador al candidato a Presidente que había sido designado como Vicepresidente de Ricardo Martinelli, quien se asiló en la Embajada de Nicaragua, luego de hacer sido encontrado culpable de blanqueo de capitales con sentencia de 10 años de prisión. El ex Ministro de Seguridad en el Gobierno de Martinelli, José Raúl Mulino, fue votado con un poco más del 34% de los votos emitidos. No existe la segunda vuelta en los comicios electorales. Los grupos organizados que participaron contra la aplicación de la denominada Ley Chorizo del 2010 le acusan de haber dado la orden a los militares que reprimieron las protestas dejando un saldo de dos personas fallecidas (una en Bocas del Toro y otra en Colón) y muchos heridos, incluyendo afectaciones de visión. Extraoficialmente, según informe independiente, se habló de nueve (9) fallecidos, incluyendo un menor de edad discapacitado que habría fallecido en su vivienda asfixiado por los gases lacrimógenos lanzados por los militares. También fue acusado de cometer actos de corrupción al adquirir radares de dudosa fuente cuando ejerció como Ministro; también se indica que conocía sobre las intervenciones telefónicas mediante el uso de una maquinita denominada PEGASUS.
El Alcalde electo el 5 de mayo Mayer Mizrachi también fue detenido en Bogotá durante seis meses por una alerta roja de la Interpol ya que en Panamá se le acusaba de haber cometido actos de corrupción bajo el Gobierno de Martinelli. [3]
El combate a la corrupción figuró como una de las principales demandas a nivel nacional por los electores, canalizada hacia figuras de elección popular: Diputados, Alcaldes y Representantes de Corregimiento. Sin embargo, la pregunta que surge de los resultados: ¿Cómo es posible que haya logrado más votos para Presidente la persona que ha hecho gala de su cercanía con Ricardo Martinelli, encontrado culpable por actos de corrupción, así como otros miembros de su gobierno del 2009-2014? Y es que en el marco de un clamor general anticorrupción se eligió a alguien involucrado en actos de corrupción, sin que haya sido elegido en partido político alguno.
Dos aspectos fueron resaltados en las elecciones generales del 5 de mayo fue la declaratoria de inconstitucionalidad del contrato de Minera Panamá (filial de la canadiense First Quantum Minerals), lograda por diversas manifestaciones realizadas entre octubre y noviembre del 2023, de varios grupos, población en general a través de sus organizaciones, ambientalistas, ecologistas, sindicalistas, pobladores campesinos, jóvenes, entre otros. Se trató, según varios analistas, de un movimiento urbano (citadino) principalmente, por la alta participación de los jóvenes que acudieron al llamado. Según se ha escrito, las movilizaciones de octubre y noviembre de 2024 fueron contra una transnacional y contra el “estabishment”.[4] Se aduce que no sólo se luchó contra las transnacionales, sino que además se hizo contra los partidos políticos tradicionales que todos habían estado a favor de la mina de Donoso, las firmas de abogados y poder económico que trabajaban o apoyaron el contrato minero, situación que contrasta con la elección de un candidato pro-minería como Mulino.
Lo cierto es que estas movilizaciones fueron antecedidas por varios días de manifestaciones en la calle en julio del 2022 en las que participaron, principalmente, organizaciones populares a razón de los principales problemas de desigualdad sentidos por la población, organizaciones que fueron sometidas a un denominado diálogo, al que acudieron representantes de organizaciones, de la Iglesia católica, principalmente, otras denominaciones de Iglesias y funcionarios del Gobierno. En este momento se llegó a acuerdos que el Gobierno nunca cumplió, entre los que se encontraban, por primera vez en la historia del país, la exigencia de controlar los precios de artículos de una canasta saludable, promoviendo su acceso a la mayoría de la población; además, se discutieron temas vinculados al alto costo de los medicamentos y su escasez en entidades públicas, se integraron y discutieron temas relativos a las excesivas ganancias obtenidas por grupos oligopólicos, del poder económico real, y se logró, por un período de tiempo, un subsidio de los contribuyentes a las distribuidoras, que garantizó un menor precio del combustible. También se logró que las sesiones del diálogo fueran televisadas, pudiendo la población darle seguimiento al mismo. Los medios tradicionales no lo hicieron, sólo se pudo lograr que el canal público y canales alternativos lo hicieran.
Los medios de comunicación tradicionales jugaron el papel de los accionistas y dueños de los medios, quedando evidenciada ante la sociedad su intención de satanizar ideológicamente la posición de los grupos, cuyos dirigentes participaron en éste y otros momentos de lucha. La sociedad panameña pudo identificar claramente a los denominados mercenarios de la información, identificados con la derecha del país y transnacional. Se judicializó la protesta, se levantaron procesos en contra de algunos luchadores sociales, de forma que se pudo también identificar aún más la colusión existente entre los poderes del Estado. Esta situación se dio en estos dos últimos momentos (2022 y 2023), pero más crudamente en el 2023.
El 5 de mayo, en segundo lugar, sin lograrlo, por segunda vez [5], se ubicó Ricardo Lombana, aunque sus principales promesas estuvieron vinculados a la corrupción, principalmente. Pese a quedar en segundo lugar en cuanto a número de votos, su posición no ha estado alejada de los planteamientos de cualquier partido tradicional, obteniendo, como se indicó sólo tres de sus postulados a la Asamblea Nacional. El discurso anticorrupción fue utilizado politiqueramente, ya que el Sr. Lombana fue nombrado en el gobierno del Panameñismo con Mireya Moscoso en una entidad del Estado, a solicitud de su padre, pero durante ese período se trasladó a EE UU a estudiar una maestría. También durante el gobierno del PRD de Martin Torrijos en 2004, fue nombrado asesor presidencial y luego en el consulado de EE UU. Varios de sus colaboradores cercanos estuvieron involucrados en la corrupción de las privatizaciones de empresas estatales. Igualmente se pronunció a favor de la minería al principio, así como su Vicepresidente, pero luego cambió el discurso de forma oportunista.
En la contienda participaron ocho candidatos (dos candidatas y 6 hombres) a la Presidencia. La mayoría de los grupos organizados de la izquierda panameña se sumaron a la propuesta del Plan para la vida Digna representado en la candidatura por libre postulación de Maribel Gordón. Los otros candidatos (7) representaron el continuismo del modelo neoliberal administrado por todos los gobernantes desde 1979. Por primera vez se incluyeron en las volantes de votación tres candidatos (as) de Libre Postulación.
Ningún Partido logró la mayoría parlamentaria que buscaba, lo que podría representar una dificultad en cuanto a la correlación de fuerzas políticas en la Asamblea Nacional de Diputados. El partido del Presidente electo, logró 14 de las 71 curules, el segundo, el Partido MOCA de Lombana sólo 3, mientras que los denominados Independientes obtuvieron cerca de 19 diputados (as). El Partido oficialista PRD logró también 13, originalmente, 8 el partido Cambio Democrático y 8 el partido Panameñista. La fragmentación del voto es evidente aunque en esta ocasión pareciera que los autodenominados independientes, algunos de la coalición VAMOS, seguirían los lineamientos de sus mentores visibles (exdiputados Juan Diego Vásquez y Jorge Silva), situación que no parece muy clara, aún.
Surge, además, la duda razonable de si será suficiente tener acuerdos de mayoría en la Asamblea Nacional (AN) para mejorar la calidad material de vida de la gran mayoría de los panameños y panameñas, así como para controlar la corrupción de las instituciones, de los cargos de elección popular. Es aquí, en la AN, donde se discute, entre quienes la integran, la aprobación de leyes, imponiendose, tradicionalmente, los grupos de partidos que logren la mayoría parlamentaria, independientemente si su propuestas representan soluciones a los problemas que afectan a la mayoría de la población. Las desigualdades sociales no necesariamente están en el centro de los debates que se esperan en la Asamblea Nacional de Panamá, aunque históricamente se utilizan en los torneos electorales. En la práctica, al momento de aprobar leyes, el Órgano ejecutivo ha utilizado hasta la compra de votos para imponerlas.
Pasadas unas semanas de las elecciones, todavía se disputan entre los partidos tradicionales y otros grupos de supuestos independientes, curules del hemiciclo Parlamentario (AN) y puestos de elección popular de otras circunscripciones (Representantes de Corregimiento y Alcaldías). Entre los partidos tradicionales controlarán la mayoría de las Juntas Comunales del país; y, más de 335 representantes de corregimiento, quienes son los más cercanos a las comunidades, estarán bajo los partidos PRD y CD - Cambio Democrático del candidato presidencial Rómulo Roux. Este último fue uno de los abogados integrantes de la firma que redactó el contrato de Minera Panamá que contaba con 25 cláusulas inconstitucionales. El partido oficialista (dividido ahora en tres propuestas de más de lo mismo) obtuvo la mayoría de los representantes de Corregimiento en las provincias más afectadas históricamente por la desigualdad social (Bocas del Toro, Colón), mientras que el CD en sectores donde la minería ha tenido su efecto en algunas comunidades, y en provincias donde su aliado en estas elecciones, el Partido Panameñista ha tenido presencia histórica; el Molirena, aliado del PRD oficialista también obtuvo una cantidad significativa de Representantes de Corregimiento (103).
Pocos candidatos se reeligieron en la Asamblea Nacional. Entre los que lograron la reelección figura el Presidente de la bancada del partido PRD, marcado como corrupto, con 40 años como Diputado, desde 1984, teniendo como suplente a su hijo por un circuito de la Provincia de Bocas del Toro. El Partido Popular (PP), anteriormente Partido Demócrata Cristiano (PDC), que fue antimilitarista y participó en el primer Gobierno desde las elecciones de 1989, logró sobrevivir por las fórmulas antidemocráticas aplicadas por los Partidos Tradicionales al Código Electoral, teniendo menos de 25,000 adherentes. Según el Código Electoral para que un partido político deje de existir debe obtener un número de votos inferior “…al 2 % del total de los votos válidos emitidos en las elecciones generales para presidente, diputados, alcaldes o representantes de corregimiento, la que le fuera más favorable”. Esto le ha permitido mantenerse como Partido (al PP), con baja cantidad de adherentes, sin ganar la Presidencia pero tiene dos diputados y 13 Representantes de Corregimiento.
El Tribunal Electoral aparece en la Constitución Política del país como garante de los derechos de participación política (elegir y ser elegido). [6] Se trata otra de las instituciones públicas cuestionada permanentemente (el Tribunal Electoral y la Fiscalía Electoral) por la forma poco clara como se arriba a resultados que siempre han beneficiado a los sectores de poder económico y político del país, además por su integración entre los Magistrados, algunos que favorecen abiertamente ciertos candidatos y posturas ideológicas.
Para el proceso de 2024, tres días antes de las elecciones la Corte Suprema de Justicia se pronunció acerca de un Recurso de Inconstitucionalidad presentado por una Resolución del Tribunal Electoral que permitió la candidatura de José Raúl Mulino, quien no había sido escogido en el proceso de primarias del Partido de Ricardo Martinelli (Realizando Metas – RM) ni llevaba, por consiguiente, Candidato (a) a la Vicepresidencia. Esto, a juicio del demandante, no se compadecía con lo indicado en la Constitución Política de Panamá. Fue un papel nefasto el del Tribunal Electoral a favor de la candidatura de Mulino, siendo éste una figura de beneplácito de los EE UU.
El pantallazo brindado acerca de los resultados nos indica que en Panamá, además de continuar la aplicación del modelo neoliberal, el declarado como ganador de las elecciones (José Raúl Mulino) se ubica abiertamente al lado de los empresarios, lo que indica que en las elecciones la ultraderecha obtuvo la Presidencia. Así lo ha manifestado el nuevo Presidente electo del Partido Realizando Metas (RM) en repetidas ocasiones: “Lejos de ser un presidente populista, que no lo soy, sería un presidente pro-empresa privada para ponerlos a generar trabajo, empleo e impuestos para el país”, indicó el presidente electo”. [7] El alcalde electo del principal Distrito de la República (Distrito de Panamá), nacido en Panamá de padres de origen hebreo-jamaicano y los supuestos independientes comulgan con visiones que van desde VOX hasta ser simpatizantes de Bukele. Es el caso de Edison Broce quien fue postulado por el Partido Popular a la Alcaldía después de haber sido Diputado Independiente en el período 2019-2024. Asistió a un evento de VOX en República Dominicana. Así lo consignó en su cuenta de Facebook del 6 de octubre de 2023, indicando que había tenido un buen intercambio con Santiago Abascal, fundador y líder de VOX, resaltando, además, el criterio de “libertad para lograr el desarrollo y prosperidad de nuestras naciones”.
Las primeras tareas que emprenderá el Presidente electo se articulan con las demandas de la derecha y el FMI: atender el Programa de Invalidez Vejez y Muerte de la Caja de Seguro Social, tratando de aumentar la edad de jubilación y aplicar reformas a otras medidas paramétricas. También se ha comprobado en los planteamientos del gremio de los comerciantes e industriales del país, la Cámara de Comercio e Industrias de Panamá, así como en los nombramientos del Consejo de Gabinete (Órgano Ejecutivo).
Los integrantes del Ejecutivo anunciados han producido el beneplácito de varios organismos internaciones, de calificadoras de riesgo y de la canadiense Minera First Quantum. Uno de ellos es el Ministro de Economía y Finanzas recién designado quien es calificado como una persona aceptada con agrado por los organismos internacionales y el sector privado mundial y local. La propia personalidad calificada de “arrogante” y déspota del Presidente Mulino no parece molestar a algunos de los que lo eligieron, ni siquiera a los medios de comunicación tradicionales, como ha sido acotado por Claridad Panamá en X: "Vean cómo los tratan y solo se ríen. Pero cómo atacaron al SUNTRACS y a otros cuando la lucha contra el contrato minero el pueblo los repudiaba y catalogaba de mercenarios. Incluso Mulino amenaza con divulgar información sobre ellos como lo hizo Martinelli, pero aquí ni fu ni fa”. [8]
Panamá siempre ha estado bajo el paraguas del Pentágono de los Estados Unidos. En esta ocasión no ha sido la excepción. La Embajadora de Estados Unidos en Panamá se reunió con el recién electo Presidente y le dio su visto bueno; así fue registrado en su cuenta de X. “En una productiva reunión con el presidente electo @JoseRaulMulino reafirmamos la amistad entre nuestras naciones. Conversamos sobre temas vitales para los dos países como migración irregular, comercio bilateral, inversiones estadounidenses en Panamá y seguridad”.[9] Los intereses geopolíticos y económicos del país del norte están asegurados. También lo están a través del nombrado Ministro de Seguridad del nuevo Ejecutivo, ex Comisionado jubilado, exjefe del Servicio Nacional de Fronteras, quien ya ha sido felicitado por el Instituto de Cooperación para la Seguridad del Hemisferio Occidental (WHINSEC) de cuyo salón de la fama es integrante. [10] Entre sus méritos, en su presentación, Mulino destacó que fue el responsable de la expulsión de la guerrilla colombiana del Darién.
En materia económica se enfrentan varios desafíos: lograr recuperar el crecimiento coyuntural de la economía que se vivió durante el mandato de Martinelli; cumplir con las imposiciones de los organismos internacionales (ajuste fiscal, modificación del sistema de pensiones, aumentar el empleo como demanda nacional, además de mantener la oposición en las calles de la minería a cielo abierto). Además de estaos desafíos, el Presidente electo deberá mantener al Ejecutivo fuera del alcance de su mentor, el enjuiciado Ricardo Martinelli.
Muchas dudas se ciernen sobre el futuro próximo del país. ¿Se logrará unir las fuerzas que le hagan gobernable al Ejecutivo los cinco años de administración pública? ¿Será un período de pase de facturas a los que les abrieron expedientes y los persiguieron con el Sistema Judicial Panameño? ¿En qué quedará la lucha contra la corrupción utilizada como consigna en la campaña electoral? ¿Se harán los cambios constitucionales requeridos a nivel nacional? ¿Cómo se desarrollará la política migratoria, cerrando la frontera de Darién? ¿La integración regional? ¿La recuperación de la confianza en Panamá? Cómo se recuperará la confianza perdida en las instituciones? ¿Se atenderán las demandas de los sectores populares?
Lo cierto es que las organizaciones populares con sus dirigentes estarán siempre al lado de la población más vulnerable. La organización es cada vez más urgente y necesaria, superar las diferencias. Resulta intolerable el accionar ideológico-político de la derecha y su reacomodo, por lo que resulta imperioso identificar las formas que tiene la derecha de reacomodar el sistema hacia sus intereses globales, sembrando entre la población sencilla, ideas de odio, de intolerancia hacia los de su clase. Es necesario para lograr los resultados esperados: la incorporación de la población en la toma de decisiones políticas y sociales, en una real democracia participativa.
Panamá, 27 de mayo de 2024.
[1] En las reformas del Código Electoral después del proceso de 2019 se había establecido que los independientes no tendrían vínculo con partidos políticos, pero en la últimas reformas (previo al proceso electoral de 2024) se estableció que se requeriría una cantidad de firmas para postularse como candidato(a) de libre postulación. La categoría de independientes (pese a no haber obtenido las firmas requeridas) se siguió utilizando por el grupo de candidatos que fue liderado por dos exdiputados autodenominados como independientes del período 2029-2024.
[2] El documento de Santa Fe I, que se elaboró durante el periodo del Ex Presidente Ronald Reagan identificaba, ahora, a Torrijos como obstáculo a los planes del imperio. La política exterior estadounidense había cambiado y no quería decir que en realidad Torrijos fuera un obstáculo, como nunca lo fue, para los intereses de USA
[3] https://www.eltiempo.com/amp/archivo/documento/CMS-16635714 Visitado el 13/5/2024
[4] Rodríguez, Abdiel (2024). El Despertar de un pueblo. https://www.laestrella.com.pa/panama/abdiel-rodriguez-protestas-de-2023-fueron-contra-una-transnacional-y-el-establishment-CE7431958 22/5/2024
[5] Lo había intentado como Candidato Independiente en el proceso electoral del 2019 en el que se ubicó en el tercer lugar como Candidato a la Presidencia del país. Ahora, en el 2024, lo hizo con el Partido MOCA (Movimiento Otro Camino).
[6] Ver la Constitución Política de Panamá, Artículos Nos. 135-141 y 142 – 145 y el Acuerdo 7-1 (De martes 15 de febrero de 2022) Que aprueba el Texto Único del Código Electoral y ordena su publicación en la Gaceta Oficial y en el Boletín Electoral. (Gaceta Oficial No. 29482-A de 22 de febrero de 2022)
[7] https://www.laestrella.com.pa/panama/nacional/empresarios-dan-espaldarazo-al-presidente-electo-jose-raul-mulino-HY7313889 Visitado el 13/5/2024
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